CGT gana dos sentencias que reconocen derecho de madres monomarentales en sector público

Federación Enseñanza CGT. Ante la negativa del Departamento de Educación a acabar con la discriminación que sufren las familias monoparentales, CGT enseñanza presentó dos demandas solicitando la ampliación del permiso de maternidad de dos profesoras afectadas por esta discriminación. La razón de esta demanda fue que los bebés de dichas familias solo pueden acceder al tiempo de cuidados establecido por la ley para la madre, mientras que los y las menores que forman parte de núcleos familiares biparentales pueden acceder, además, al permiso que la ley establece para el otro progenitor (permiso de paternidad).

El TSJA ha dictado sentencia en la que reconoce el derecho de las dos madres a disfrutar del permiso paternidad. “Se reconoce como situación jurídica individualizada el derecho de la recurrente, como integrante de familia monoparental, a la ampliación de su permiso por nacimiento de hija por el tiempo correspondiente”.

El TSJA ha argumentado la sentencia basándose en el interés superior del menor: “el derecho de igualdad y la primacía del interés y protección de los hijos menores consagrado en nuestra CE y en las normas internacionales citadas, impide que la atención, cuidado y desarrollo del menor de la familia monoparental sufra una merma respecto a aquellos otros menores de familias biparentales que van a recibir un distinto periodo de cuidado y atención directos de sus progenitores, siendo rechazable la discriminación del menor por su propia condición o por el estado civil o situación de su progenitor”

CGT lamenta profundamente que las familias monoparentales tengan que padecer un vía crucis judicial para que se reconozcan sus derechos. La situación es triplemente grave porque a las dificultades normales que tiene atender a un bebé por un solo progenitor, se suma tener que realizar un sinfín de trámites burocráticos y judiciales, para que su hijo pueda tener el mismo derecho que cualquier niño de una familia biparental. A este problema se suman tanto  el consiguiente coste económico derivado de tener que contratar abogados, como que el disfrute del permiso por nacimiento del segundo progenitor (permiso paternidad) se podrá realizar pasados varios años, cuando lo razonable es que se disfrute cuando el niño es un bebé.

CGT confía en que el Departamento de Educación cumplirá la sentencia a la mayor brevedad, y a partir de ahora mostrará empatía hacia las familias monoparentales dejando de discriminarlas y por tanto les reconozca de oficio, el derecho que les pertenece.